El 24,1% de las viviendas en edificios plurifamiliares de la Comunidad de Madrid están alquiladas, según la Encuesta Continua de Hogares de la Instituto Nacional de Estadística, que también revela que el peso de las viviendas arrendatarias se ha mantenido estable en los últimos años. Esto significa que en las comunidades de propietarios de Madrid, casi 1 de cada 4 pisos está habitado por un inquilino y no por el propietario. Y, como su nombre indica, una comunidad de propietarios está formada por propietarios, por lo que ¿Qué papel juegan los inquilinos?
Tenemos que empezar desde Al alquilar una vivienda en un edificio plurifamiliar, la relación contractual es entre el propietario y el inquilino, y son ellos quienes asumen los derechos y obligaciones. La comunidad de propietarios es completamente ajena a esta relación. Sin embargo, como veremos, lo establecido en este contrato puede modificar los derechos que tiene un arrendatario en materia de servicios a la comunidad.
¿Qué relación tiene un inquilino con el consejo de propietarios?
Bueno, inicialmente, ninguno. El arrendatario no forma parte de la comunidad de propietarios en cuanto órgano de administración y copropiedad de las zonas y elementos comunes de un inmueble. Esto significa que no forma parte del proceso de toma de decisiones: no puede solicitar la celebración de una junta, solo puede asistir a una reunión si el propietario del alojamiento en el que reside lo delega para que actúe como representante (siempre por escrito). ) y por lo tanto no tiene voz ni voto. Pero la comunidad tampoco puede establecer comunicación oficial con un inquilino, aunque sea para informarle algo que le concierne directamente. Si desea informarle de alguna actuación, deberá comunicarlo al propietario para que pueda tomar las medidas que estime oportunas. Y, por supuesto, un inquilino no puede ser presidente de una comunidad de propietarios.
¿Quién usa la piscina (si la hay), propietario o arrendatario?
Un inquilino puede hacer uso y disfrutar de todas las zonas comunes de la comunidad de propietarios. Esto significa que, si hay una piscina o un gimnasio, puedes usarlos como el resto de tus vecinos, a menos que el propietario haya acordado con tu inquilino que el uso de uno de estos servicios está excluido del contrato y su uso y el disfrute está reservado. Porque lo que no está permitido es que el propietario y el inquilino las utilicen.
¿Puede un inquilino instalar un sistema de aire acondicionado?
Si un inquilino quiere realizar obras o reformas que afecten a los elementos comunes del inmueble, como por ejemplo la instalación de un sistema de aire acondicionado, tendrá que contar con el visto bueno de la comunidad y para ello tendrá que recurrir al propietario. para que sea él quien ejecute la solicitud correspondiente.
¿Quién paga los gastos de comunidad? ¿Y los derramas?
En cuanto a los gastos derivados del mantenimiento de la comunidad, el pago de la cuota se pactará entre el propietario y el arrendatario. El acuerdo entre las dos partes puede incluso extenderse a derrames extraordinarios. Aunque el arrendador es responsable de pagar estos gastos, puede estar en el contrato de alquiler que se repercutan al arrendatario.
¿Qué sucede en caso de conflicto entre un inquilino y la comunidad de propietarios?
Bueno, depende del caso. Si el arrendatario incurre en actividades nocivas, el presidente puede pedirle que se abstenga, pero si no lo hace y el ayuntamiento decide emprender acciones legales, tendrá que hacerlo no solo contra el arrendatario, sino también contra el propietario. Si, por el contrario, es el ocupante de la vivienda el perjudicado por una acción de la comunidad (como daños por determinadas obras en el inmueble), puede reclamar daños y perjuicios sin necesidad de recurrir al arrendador.
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