
Para Antonio Ocaña, Ingeniero industrial
Actualmente en el La comunidad de Madrid, se requieren instalaciones térmicas con una potencia de salida nominal superior a 70 kW para someterse a inspecciones periódicas de eficiencia energética, como se estipula en el Decreto 10/2014 de 6 de febrero.
La frecuencia con la que deben realizarse estas comprobaciones depende del tipo de instalación:
- Instalaciones que no utilizan combustibles gaseosos o renovables (p. Ej. Diesel o carbón): cada 2 años.
- Instalaciones que utilizan combustibles gaseosos o renovables: cada 4 años.
- Bombas de calor: cada 2 años (parte calor) y cada 5 años (parte fría).
- Sistemas de aire acondicionado: cada 5 años.
Esta no es una recomendación ni una acción opcional. Efectivamente, las comunidades de propietarios que no se sometan a estos controles podrían ser sancionadas con multas de hasta 90.000 euros.
Una herramienta útil
Pero, más allá de ser el resultado de regulaciones, las inspecciones de eficiencia energética son un herramienta útil para conocer el estado real de las instalaciones y detectar puntos de mejora de la instalación que generen ahorro energético y económico.
Las comunidades de propietarios que no se sometan a estos controles podrían ser sancionadas con multas de hasta 90.000 euros
Así, por ejemplo, se observa que los controles realizados en instalaciones de calefacción centralizada que todavía utilizan carbón nunca obtienen una valoración favorable, por ser muy ineficaces. Y, además, se encuentran cerca del final de su vida útil: por normativa, este tipo de instalaciones pueden ser reparadas, pero una vez obsoletos, deben ser reemplazados por calderas que utilicen otro tipo de combustible.
Lo mismo ocurre con las antiguas instalaciones que funcionan con diésel y utilizan tecnologías ineficientes. En este caso, al reemplazar las calderas, generalmente es optar por equipos de condensación de gas natural, que ofrecen un rendimiento mucho mejor y ahorros de energía sustanciales.
De hecho, en muchos casos, la inversión realizada por la comunidad en la renovación de instalaciones térmicas, mediante la aplicación de medidas de ahorro y eficiencia energética (MAE), se compensa con el ahorro realizado en la factura energética, por lo que no habría necesidad de derrames.
¿Quién debe realizar la inspección?
Recuerda que la calefacción es uno de los mayores gastos que las asociaciones de propietarios tener que afrontar. Al migrar a tecnologías más eficientes, los beneficios se multiplican para las comunidades de propietarios, que obtienen más comodidad y gastan menos energía. Y también ayuda a evitar que millones de toneladas de dióxido de carbono sean emitidas a la atmósfera, provocando que ciudades como Madrid alcancen altos niveles de contaminación, perjudicial para la salud de las personas.
Habitualmente, las autoridades locales confían estos controles de eficiencia energética a las empresas que se encargan del mantenimiento de las instalaciones, porque son las que mejor conocen la instalación en detalle.
Sin emabargo, Los profesionales de mantenimiento deben estar acreditados para realizar estas inspecciones.. En caso de no poder prestar este servicio, se recomienda contactar con una empresa especializada en la gestión de instalaciones térmicas que ofrezca un servicio completo, incluyendo las gestiones a realizar con la Dirección General de Industria, y que, además, cuente con los técnicos capacidad para llevar a cabo las medidas de economía y eficiencia derivadas de las inspecciones.
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