Por Antonio Ocaña, ingeniero industrial
la Real Decreto 736/2020 de 4 de agosto, que regula la contabilización de los consumos individuales en las instalaciones térmicas de los edificios, es muy esperado en el sector.
Con él se completa la transposición de la Directiva 2021/27 / UE sobre eficiencia energética, que debería haber sido aprobada hace años, y que llevó a la Comisión Europea a incoar un procedimiento de infracción contra España en 2015 por no haber transpuesto la directiva a tiempo .
Ahora que la ley está definitivamente aprobada, ¿qué aspectos fundamentales se deben tener en cuenta para asesorar adecuadamente a las comunidades de propietarios?
¿A qué comunidades de propietarios afecta esto?
El reglamento se refiere a edificios con sistemas de calefacción o refrigeración construidos antes de la aprobación del reglamento sobre instalaciones térmicas en edificios (RITE) de 1998.
Los edificios ubicados en las zonas más calientes del país están exentos de la instalación de medidores individuales, en edificios en los que esto no sea técnicamente factible (lo cual debe ser probado por un instalador calificado) o en los que la inversión no se pueda recuperar en la mayor medida posible. 4 años, a partir del ahorro que se pueda generar.
¿Qué tipo de publicación deberían instalar?
Aunque la norma establece la necesidad de instalar contadores, excepcionalmente en instalaciones de calefacción donde esta opción no sea técnicamente viable (instalaciones de calefacción de columnas), será obligatorio instalar distribuidores de costes de calefacción. Además, el RD establece que los sistemas de contabilidad de consumos instalados deben contar con un servicio de lectura remota.
Cuánto puedes ahorrar?
La norma estima que la instalación de contadores individuales puede suponer un ahorro económico medio del 24% del coste total del edificio y, por tanto, en la mayoría de los casos, la inversión necesaria para instalar los dispositivos se recupera en menos de cuatro años.
Para que este ahorro sea posible, los usuarios finales de las instalaciones térmicas “deben disponer de los medios necesarios para controlar su propio consumo; ya sea control manual o control automático, como válvulas termostáticas en cada radiador, o válvulas de zona asociadas al termostato ambiente ”.
¿Cómo se distribuirán los gastos de los vecinos una vez instalada la contabilidad individualizada?
Determinar cuánto peso deben tener los costos fijos y las variables del sistema de calefacción y refrigeración depende de lo acordado por la comunidad del vecindario. Sin embargo, los legisladores sugieren que la parte variable debe representar del 60 al 75% del costo total, de acuerdo con las recomendaciones técnicas de la empresa de mantenimiento de la instalación térmica.
¿Qué deberían hacer las asociaciones de propietarios?
La norma establece dos plazos: un plazo para obtener al menos un presupuesto estandarizado que determine la viabilidad técnica y económica y otro plazo para la activación de la instalación, que será 15 meses después.
Estos tiempos varían en función de la zona climática en la que se ubique el edificio. A el caso de la Comunidad de Madrid, que se ubica principalmente en la zona climática D, el plazo para solicitar un presupuesto a un instalador autorizado es:
• 1 de julio de 2021 en edificios con 20 unidades o más
• 1 de diciembre de 2021 en edificios con menos de 20 viviendas.
Sin embargo, aquellos de nosotros que trabajamos en la industria recomendamos no sobrepasar demasiado los límites, dada la alta demanda que experimentarán los instaladores en los próximos meses.
El presupuesto que establezca la empresa instaladora homologada deberá ser libre y respetar la estructura detallada en el Real Decreto en su Anexo III.
¿Cuáles son las ventajas de esta regla?
El objetivo de esta ley es mejorar el rendimiento energético de los edificios en función del consumo individual. Gracias a la contabilización individualizada cada vecino pagará por la energía que consume, donde fomenta que se lleve a cabo un uso optimizado de la instalación, reduciendo en consumo de energía (sin renunciar al comfort) y, en consecuencia, disminuyan las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera.
También es el momento de resolver patologías existentes en edificios como el desequilibrio hidráulico y térmico donde la calefacción apenas llega a algunas viviendas mientras que otras han tenido que abrir ventanas por exceso de calor. Esto se puede solucionar con elementos de regulación y control como válvulas termostáticas. Por tanto, se recomienda que el instalador tenga experiencia no solo en el montaje de equipos de individualización sino también en instalaciones térmicas e hidráulicas.
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